LOS COMPROMISOS SE TRANSFORMAN EN ACCIONES PARA ELEVAR LA CALIDAD DE VIDA: DEL MAZO MAZA

Atlacomulco, México, 29 de junio de 2008.- “Isidro Fabela nos enseñó que los compromisos para que cobren sentido, deben volverse acciones que mejoren la realidad social. Sin lugar a dudas, el gobierno ha respondido a la sociedad, haciendo de estos compromisos nuestras líneas rectoras, nuestras metas y objetivos, nuestro trabajo diario”, manifestó Alfredo del Mazo Maza, secretario de Turismo, al pronunciar el discurso oficial durante la ceremonia conmemorativa por el 126 aniversario del natalicio del ilustre mexiquense Isidro Fabela Alfaro. Ante el gobernador Enrique Peña Nieto, del Mazo Maza resaltó que al igual que su antecesor, cuya administración marcó el inicio de la modernización política y el desarrollo económico de la entidad, el Ejecutivo estatal, con un alto sentido de responsabilidad ha hecho una serie de compromisos que dirigen la acción gubernamental: “se trabaja para el hoy –afirmó- y también para el mañana. Las acciones de gobierno sirven para transformar las realidades”. El secretario mencionó al respecto que aumentar el nivel y calidad de vida de los mexiquenses, combatir la pobreza, mejorar y acercar las oportunidades para un desarrollo integral, ordenado y armónico, son justamente los objetivos que tiene definido claramente el gobierno de Enrique Peña Nieto, quien a la fecha, ya ha cumplido 305 de esos compromisos en materia de educación, salud, comunicación, turismo e infraestructura, principalmente. Al recordar que durante su gestión el ex gobernador Fabela Alfaro impulsó acciones en diferentes vertientes para disminuir las diferencias sociales, del Mazo Maza señaló que en la actualidad el liderazgo de Peña Nieto “genera una dinámica de crecimiento que se traduce en justicia y acceso a un mejor nivel de vida a través del empleo, la educación, la salud, la cultura y el esparcimiento”. El titular de la Secretaría de Turismo expresó que de esa manera se está logrando que la sociedad mexiquense deje atrás serias diferencias económicas y sociales para transformarse en una sociedad igualitaria y equitativa, haciendo ciudadanos responsables de su futuro y su realidad, que era el sueño de Isidro Fabela. En el marco de la ceremonia, el gobernador entregó un reconocimiento a María del Consuelo Mercado González, directora del Centro Regional de Cultura Isidro Fabela, por su labor al frente del Grupo de Convivencia Internacional y por su desempeño como promotora de la identidad mexiquense y la paz mundial. Posteriormente, el mandatario estatal, junto con los titulares de los poderes Legislativo y Judicial, Carlos Alberto Cadena Ortiz y José Castillo Ambriz, respectivamente, depositó una ofrenda floral y montó guardia de honor ante la estatua de Isidro Fabela Alfaro, quien ha sido reconocido internacionalmente por su labor diplomática y su labor en defensa de los derechos humanos, entre otros aspectos. En el evento, Rogelio Caballero Meraz, alcalde de Atlacomulco, hizo una semblanza de quien fuera gobernador del Estado de México, mismo que se caracterizó por hacer de la defensa de la soberanía, la no intervención y la autodeterminación de los pueblos, ejes de su postura diplomática, lo que le valió que entre 1928 y 1961 recibiera condecoraciones de Rumania, Francia, Chile, Holanda, Etiopía, el gobierno de la República Española, y Ecuador. A nivel nacional, quien fuera juez de la Corte Internacional de la Haya en 1946, recibió las más altas distinciones que da el gobierno de la República: Medalla a la Lealtad de la Patria en 1932; Medalla al Mérito Revolucionario, en 1942; Defensores de la República y Legión de Honor, en 1951, así como la Medalla Belisario Domínguez, que entrega el Senado, en 1960. Por su parte, la UNAM le otorgó el Doctorado Honoris Causa en 1951. Como gobernador del Estado de México, en 1942, Fabela Alfaro fomentó el surgimiento de las primeras zonas industriales como Tlalnepantla, Naucalpan, Cuautitlán, Ecatepec, Lerma y Toluca; apoyó el desarrollo agropecuario de la entidad y construyó el sistema carretero para comunicar al Estado de México con el Distrito Federal sobre todo, ya que era su principal mercado.